Todo plan de Marketing conlleva desarrollar una estrategia inicial para poder definir sus características, concretar sus objetivos y marcar los tiempos.Cada plan debe adaptarse a las peculiaridades del producto que se quiere hacer llegar al consumidor. En las empresas tecnológicas, estas particularidades permiten aplicar una metodología propia que ayude a dar personalidad a la marca y a obtener resultados óptimos. Por esto, te contamos cómo diseñar un plan de marketing digital para empresas tecnológicas.
Tres claves que hay que tener en cuenta antes de empezar a trabajar
Tecnología implica conceptos como novedad, cambio y evolución. Lo que tenemos hoy probablemente esté obsoleto dentro de un mes y esta idea es al mismo tiempo una ventaja y una desventaja. Porque por un lado nos facilita distinguirnos fácilmente de la competencia y nos invitar a renovarnos continuamente; pero por otra nos obliga a pensar siempre en clave de futuro más que de presente. De ahí que los planes de Marketing de empresas tecnológicas deban trabajarse de una forma concreta y diferente a los que estén pensados para empresas de otros sectores.
En este sentido, hay tres claves que se pueden encontrar entre líneas en todo plan de Marketing tecnológico. Por un lado tenemos la necesidad de generar contenido relevante, ya que este sector suele consumir una gran cantidad de información. Luego está la adaptabilidad, que no es más que la plasmación en nuestra estrategia de esa necesidad que hemos comentado de actualizarnos constantemente para no quedarnos atrás. Y finalmente destacamos la necesidad de seguir una táctica que interconecte todos nuestros canales de comunicación y que precisamente explote las posibilidades que nos ofrecen las nuevas tecnologías para hacer llegar nuestros mensajes.
Pasos para diseñar un Plan de Marketing en el sector tecnológico
Así, una vez que tenemos claras estas tres claves podemos empezar a plantearnos el desarrollo de un plan de Marketing específico a través de estos diez pasos:
-
Conocer al cliente (Buyer Persona):
Es el primer punto fundamental en toda estrategia de Marketing, porque si no conocemos bien a nuestro público potencial estaremos perdidos. De hecho, a la hora de crear y diseñar nuestro producto ya habremos tenido en mente a qué tipo de personas nos queríamos dirigir. Por eso, para empezar es recomendable hacer un estudio de mercado, realizar encuestas o entrevistas y analizar todos los datos posibles para conocer los gustos de nuestro Buyer Persona, sus motivaciones y qué necesidades tiene que nosotros podamos colmar. Es, en definitiva, un proceso de estudio que deberá ser también continuo y actualizable, porque las tendencias y los gustos cambian con el tiempo (sobre todo en Tecnología) y, con ellos, el perfil de los consumidores.
-
Análisis DAFO para estudiar el entorno y el contexto en el que nos movemos:
Ya hemos identificado a nuestros clientes. Pero, ¿nos conocemos a nosotros mismos y a la competencia que tenemos? Quizá uno de los mayores errores que podemos cometer es dar por hecho que dominamos el mercado en el que nos movemos y que sabemos bien lo que este demanda.
Por eso, es recomendable realizar un análisis DAFO, porque este trabaja en dos vertientes. A nivel interno nos dirá nuestras fortalezas y debilidades; y a nivel externo nos mostrará las amenazas y oportunidades de nuestro entorno. Así, podremos saber bien dónde estamos y desde qué punto partimos dentro del mercado, lo que nos ayudará a enfocar mucho más nuestra estrategia y a establecer prioridades encaminadas a obtener resultados.
-
SMART es la clave para definir los objetivos y KPI’s:
Todo plan de Marketing se crea para conseguir unos objetivos. Y la mejor forma de definirlos es el sistema SMART, el cual nos ayuda a señalar los KPI’s o indicadores claves que nos ayudarán a medir nuestros resultados. Así, es importante que estos sean específicos (Specific), mesurables y medibles (Mesurable), alcanzables y coherentes (Attanaible), relevantes (Relevant) y realizables a tiempo (Timely). Aquí puedes profundizar en ello.
-
Brainstorming y potenciar la creatividad:
Una campaña publicitaria sin creatividad es como un jardín sin flores. Vivimos rodeados de nuevas ideas, pero por suerte nuestro cerebro es una fuente inagotable de este recurso. Por eso, hay siempre que partir del concepto de que no todo está inventado y de que en el sector tecnológico es fundamental dejar que fluya ese brainstorming para adaptar la constante evolución de su mercado a mensajes novedosos y rompedores. De hecho, podemos intentar aprovechar conceptos relativamente recientes como la Inteligencia Artificial o la Realidad Virtual para conseguir ser más creativos con nuestros contenidos.
-
Focalizarnos en el inbound marketing:
Dentro de nuestro sector el concepto de ‘fidelización’ es fundamental. El perfil habitual de consumidor tecnológico es el de una persona informada, que estudia bien las opciones que tiene antes de lanzarse a comprar. Por ello, es importante trabajar a fondo en cada ciclo de compra para acompañarle y enamorarle desde que se interesa por nuestro producto. ¿Cómo? Desarrollando un buen embudo de conversión que nos permita definir bien los pasos a seguir, desde la captación a través de los leads hasta la ‘fidelización’ y la conversión en cliente.
-
Aprovecha toda las herramientas que están a tu alcance, principalmente las tecnológicas:
Si trabajas para promocionar y vender un producto moderno, tus canales y medios deben estar en consonancia con ello. No cierres puertas, explora las últimas tendencias y herramientas y ten siempre amplitud de miras. De esta forma, en el caso de que redes sociales como Facebook o Twitter implementen nuevas funcionalidades, pregúntate cómo puedes aprovecharlas para que tu campaña se vea beneficiada. Principalmente porque si tu empresa debe estar a la última, tu campaña también debe estar trabajada desde un enfoque actual y moderno.
-
Entra a diseñar, con especial atención al embudo de conversión y a la estructura de la campaña:
Cuida el contenido dentro de tu plan de Marketing, porque va a ser la parte visible de tu estrategia. No olvides que debe ser atractivo y aportar valor a tu buyer persona y que debe supeditarse a los cuatro pasos del embudo de conversión: atraer, convertir, cerrar y fidelizar. Y todo ello dentro de un programa de trabajo bien establecido, escalable y que permita hacer un seguimiento a través de la línea temporal. De esta forma, podrás enfocar tu plan a estrategias trimestrales, mensuales o semanales, en función de si buscas objetivos más a largo plazo o inmediatos.
-
Analiza los datos:
Una vez que ya hayas puesto en marcha tu estrategia y tu plan, no pierdas de vista los resultados. Es preciso hacer un seguimiento constante de tus publicaciones y contenidos a partir de herramientas como Google Analytics, Facebook Insights y Twitter Analytics. Y esto es algo que lógicamente debe llevar tiempo, ya que es un proceso que hay que hacer con calma, para identificar qué estamos haciendo bien, qué está fallando y dónde podemos reorientar nuestra estrategia para mejorar nuestros resultados.
-
Perfecciona tu plan y corrige los errores para buscar mejorar tus resultados:
El plan perfecto no existe, pero siempre vas a tener la opción de pulirlo y mejorarlo para acercarte a esa ‘perfección’. Esto no se trata de una carrera de 100 metros lisos, sino que es una competición de maratón en la que hay que regular los esfuerzos, calcular bien y trabajar continuamente para estar a punto en cada momento.
De esta forma, de nada servirá hacer un gran esfuerzo inicial si luego no nos preocupamos de medir los resultados y de identificar los fallos que estamos cometiendo. Por eso, es en este punto donde debemos tener muy presente la ‘adaptación’ de la que hablábamos anteriormente y que nos exigirá moldear continuamente nuestra estrategia para ajustarnos a las necesidades, tanto del cambiante entorno tecnológico como de nuestra propia empresa.
-
No bajes la guardia, fidelizar al usuario es un trabajo constante:
Quizá llegue un punto en que veas cumplidos tus objetivos y los resultados de tu campaña se adapten a lo que buscabas desde el principio. Pero no cantes victoria, porque quizá lo más complicado no sea conseguir nuevos clientes, sino convertirlos en fieles de tu marca. En consecuencia, hay que prestar atención a aspectos como el servicio de atención al cliente, el servicio técnico (muy importante dentro del sector tecnológico) o simplemente el feedback en tus redes sociales, web, blog… Apuesta siempre por la novedad, busca la satisfacción y el trato humano y personal, de una forma diaria y constante, porque con ello lograrás obtener otra ventaja diferencial respecto a la competencia.
El trabajo, el ingrediente fundamental para atraer el éxito
En definitiva, crear un plan de Marketing Digital para el sector tecnológico es un proceso laborioso y exigente, que por sus peculiares características implica orientar nuestros esfuerzos a generar contenido de calidad, actual y con plena capacidad de interconexión con todos nuestros canales de comunicación. Pero si tenemos en cuenta estas claves y somos capaces de desarrollar una estrategia equilibrada y constante, atraeremos el éxito. Fundamentalmente porque el trabajo es el principal ingrediente para lograrlo.
- ¿Qué es un chatbot y qué beneficios aporta a tu estrategia de Marketing?
- ¿Cómo sacar partido al Copywriting emocional?